jueves, 12 de agosto de 2010

Rojo Sangre



Hola gente! Cómo están? Nuevamente gracias por los comentarios y por las visitas! Ya estamos arriba de las 350! Me alegra que haya interés en algo tan importante como lo es la salud y la prevención. Sigan así!

En esta nota del día de la fecha les quiero hablar un poco sobre la sangre. Es un tema muy lindo y en parte muy cotidiano.
Seguramente ya hayan leído algo sobre la sangre en notas anteriores, y seguramente la seguiré mencionando ya que es imposible no referirla a la hora de hablar del cuerpo humano.

Empecemos preguntándonos ¿qué es la sangre?

Lo primero que hay que tener en cuenta es que cuando hablamos de sangre, hablamos de un tejido más en el organismo, y no una simple sustancia que tenemos dentro. Este tejido está formado por una parte celular (los elementos formes o elementos figurados de la sangre) y una parte no celular o plasmática.
Si tuviéramos sangre en un recipiente y le sacamos todos los elementos formes de ella, nos quedaría un líquido translúcido, un poco amarillento, llamado plasma.

El plasma es casi en su totalidad agua, pero tiene en solución muchísimas sustancias importantes para el organismo tales como proteínas (la albúmina es la que está en mayor proporción), electrolitos (como el sodio, el potasio y el cloro), y otras moléculas orgánicas (como la glucosa, las grasas, etc).

Los elementos formes de la sangre se clasifican en:

* Glóbulos Rojos o Eritrocitos
* Plaquetas o Trombocitos.
* Glóbulos Blancos o Leucocitos, los cuales se dividen en: Granulocitos Neutrófilos, Granulocitos Eosinófilos, Granulocitos Basófilos, Linfocitos y Monocitos.

El 55% de la sangre es plasma, el restante 45% está constituido por los elementos formes, siendo 44% de glóbulos rojos y 1% entre glóbulos blancos y plaquetas. Prácticamente es todo plasma y glóbulos rojos ¿no?

¿Dónde se produce la sangre?

La parte celular, en el adulto, se produce en la médula ósea (la parte profunda de los huesos), más que nada en el esternón, el hueso de la cadera (hueso coxal), las vértebras, el brazo (húmero) y el muslo (fémur). Vean la fotito para ubicarse mejor.
El proceso por el cual las células sanguíneas son producidas se llama Hematopoyesis. Tanto los eritrocitos, como trombocitos y leucocitos se producen y maduran dentro de la médula ósea. Un tipo de leucocitos llamado linfocitos se desarrollan en la médula ósea y luego migran a otros órganos como el Timo o el Bazo, donde se siguen desarrollando y forman colonias de nuevos linfocitos.

Un eritrocito tarda alrededor de 7 días en producirse y madurar, y tienen una vida media de aproximadamente 120 días. El recuento normal de eritrocitos en sangre es de alrededor de 4.5 millones x mm3, variando por sexo, edad, tamaño y región donde se habite.

Un leucocito tarda entre 5 y 10 días en producirse (según de qué tipo celular se trate) y suelen vivir unas pocas horas. La gran mayoría de los leucocitos ni bien son liberados a la circulación, a la hora ya abandonaron el torrente sanguíneo y se van hacia otros tejidos donde tienen una corta vida. No es así el caso de los linfocitos, los cuales circulan o se quedan en un ganglio linfático, en el bazo, o en el timo, y pueden vivir años. El recuento normal de leucocitos en sangre es de alrededor de 7000 x mm3 siendo la mayor cantidad granulocitos neutrófilos y linfocitos en segundo lugar.

Los trombocitos se crean y se destruyen constantemente. Un paciente con una pérdida aguda de plaquetas tarda alrededor de 5 días en reponerlas y tienen una vida relativamente corta dentro del torrente sanguíneo. El recuento normal de trombocitos en sangre es entre 150.000 y 300.000 x mm3.

La parte plasmática, es en mayor proporción agua, por lo cual la incorporación y eliminación de la misma es lo que determina la composición de la sangre. Lo mismo ocurre con los electrolitos. Hay un órgano importantísimo, el riñón, el cual es el encargado de mantener el equilibrio de agua y electrolitos del organismo, manteniendo constante su participación en la composición de la sangre.

Por otro lado las proteínas plasmáticas son producidas casi en su totalidad por otro órgano indispensable para la vida, el hígado, y son las responsables de la gran variedad de funciones que puede llevar a cabo la sangre.

Por último, ciertas moléculas orgánicas como la glucosa, y las grasas son incorporadas al organismo y a la sangre por medio de la alimentación, pero también existen reservorios de estas sustancias: el hígado y el músculo almacenan glucosa como glucógeno, el tejido adiposo almacena grasas.

Así como la sangre es creada, también se destruye, ya que sus componentes envejecen y mueren, para luego ser renovados una y otra vez.
En el caso del plasma, el riñón es el encargado de depurarlo de desechos y electrolítos de más. Estos desechos son eliminados posteriormente por la orina.
En el caso de las células sanguíneas, ocurre un proceso llamado Hemocateresis, en el cual la sangre es depurada de células viejas (especialmente glóbulos rojos). Tanto el hígado, como el bazo y en menor medida la médula ósea, realizan Hemocateresis. Lo que sucede en este proceso es que los glóbulos rojos viejos carecen de la flexibilidad de los jóvenes y entonces quedan atrapados dentro de estos órganos, donde otras células específicas se los comen y los digieren.

El resultado de la destrucción del glóbulo rojo es:
Bilirrubina (que es llevada al hígado, se procesa, se almacena en la vesícula biliar, y se excreta por las heces), hierro y proteínas (que son re utilizados para formar nuevos glóbulos rojos en médula ósea).

Bueno ya sabemos qué es la sangre, de dónde viene y a dónde va, pero ¿Para qué sirve?
Esa es una pregunta con muchísimas respuestas y cada una más importante que la otra, pero por una cuestión de practicidad voy a mencionar brevemente cada una:

* Transporte de Gases como el dióxido de carbono y el oxígeno (función realizada por los Eritrocitos).
* Transporte de nutrientes, desechos, hormonas y vitaminas (función realizada por proteínas plasmáticas).
* Transporte de calor y Mantenimiento del pH y de la presión oncótica (función que se ejerce gracias a fuerzas físico-químicas).
* Protección: Inmunidad e inflamación (función realizada por leucocitos, cada tipo tiene una función específica, y proteína plasmáticas).
* Coagulación o Hemostasia: (función realizada por trombocitos y proteínas plasmáticas).

Como podrán ver, la sangre es una gran trabajadora y es indispensable su integridad para gozar de una buena salud. No es para nada complejo mantener nuestra sangre a punto. Generalmente nuestro cuerpo se encarga de hacer todo por sí mismo, solamente nosotros tenemos que brindarle los materiales.

El hígado y el riñón prácticamente se encargan del mantenimiento del plasma. Sólo tenemos que brindarles mucha agua, proteínas, y sales en su justa medida. Ahora bien el consumo de alcohol y sales en exceso son enemigos de estos órganos.

Con respecto a las células sanguíneas, vamos a referirnos más que nada a los eritrocitos (ya que componen el 44% de nuestra sangre), la médula ósea se encarga de producirlos. Para ello requiere principalmente de 3 componentes:
Acido fólico (se obtiene de vegetales verdes, frutas y semillas), Vitamina B12 (se obtiene principalmente de las carnes) y Hierro (que se obtiene principalmente de las carnes rojas).
Este último es indispensable para la formación de la Hemoglobina en el eritrocito.

La hemoglobina constituye el 95% de la proteína total del eritrocito, y es la que cumple la función de transportar gases en esta célula sanguínea (además de brindarle a la sangre esa coloración rojiza característica). En 100 ml de sangre hay una concentración:
En hombres de 13 a 17 g de hemoglobina.
En mujeres de 12 a 16 g de hemoglobina.

Si ese valor llega a disminuir de ese rango, se dice que hay anemia. A diferencia de lo que mucha gente cree, la anemia no se debe a una falta de glóbulos rojos, sino a la falta de hemoglobina. Podemos tener un recuento normal de glóbulos rojos, pero deficiencia de hemoglobina, y en ese caso se hablaría de una anemia.

Hoy en día es muy frecuente escuchar de anemias por deficiencia de hierro y se puede evitar con una buena alimentación.
Hay ciertas anemias, que tienen un origen genético y que afectan directamente la producción en la médula ósea, y en ese caso se debe seguir un tratamiento específico. Nunca pasar por alto una anemia!

Es recomendable hacerse exámenes de sangre como mínimo 1 vez por año, y llévenle directamente los resultados a su médico. No intenten autodiagnosticarse, no hagan trampa che!

Así doy cierre a esta nota, espero que se haya entendido todo, y si creen que es muy largo o muy difícil de entender y seguir, comenten así pueden orientarme en cómo continuar desarrollando los temas.
Saludos!


(Fuente de las imágenes: www.donacion.organos.ua.es
www.edubuzz.org )

6 comentarios:

  1. maxi, estoy como toda orgullosa... :)

    me muri

    nadia

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  2. http://www.lanacion.com.ar/nota.asp?nota_id=1293912

    decime que eso es mentira por favor !! jajaja

    grande gori !!

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  3. Como que el alcohol me mata el riñon y el higado?? jeje
    Nah, fuera de toda broma, bien ahi con la explicacion; es,dentro de todo, sencilla de seguir asi que segui asi Gori

    Un abrazoo

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  4. Buenisimo gori, vas a ser mi libro de repaso asi no me olvido de lo que estudie alguna vez.

    Tincho...

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  5. Elgor está contento...... Abrazo

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  6. Sentir una clase d dormimiesno y rasguer a en la parte derecha en El Medio del cuerpo k es..

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